Leyendas

El cadejo:
Dicen que Díos tras observar la maldad de algunas personas, decidió crear una figura que atemorizara al humano pero con el fin de protegerles. Que era como un perro blanco, con los ojos rojos, que provocaba miedo a todo aquel que le mirara.

Existen 2 cadejos: El blanco: que representa la bondad y que protege a las personas que caminan solas. I el negro: es lo contrario, si se le molesta atacará a quien lo perturbe.

Se cuentan muchas historias, dicen que se les aparecía a los viajeros nocturnos, se acostumbraba a viajar siempre a los hombres solteros y le molestaba que no hicieran su voluntad, y cuando se enfadaba se convertía en una bestia enorme. Otras personas decían que se alimenta de sangre de animales, cuentan que se atraviesa en la calle y no deja pasar a su acompañante.

No ha sido visto como algo malo, sino como un ser nocturno sobrenatural, los que lo vieron dicen que era del tamaño de un cachorro, nariz puntiaguda y al caminar hacía el sonido de una cabra. Muchos quisieron tocarlo pero nadie ha dicho que haya podido.

A menudo luchaba con otros espíritus, incluso pelearse con un hombre para defender a su acompañante.

El duende:
Es un hombre pequeño, orejón y barrigón con un gran sombrero, que se escondía en las cuevas más profundas y oscuras. Y que tenía predilección con los chicas jóvenes y los niños, esperándolas en sitios oscuros o cerca de ríos para llevárselas. Se decía que lo habían visto cerca de Trujillo.

La llorona:

Tiene apariencia escalofriante de una mujer vestida de blanco, alta, delgada de rostro cadavérico y larga cabellera negra que suele asustar a las personas en los ríos y caminos solitarios, que hace enloquecer con sus grandes carcajadas que en poco tiempo cambia por llanto desconsolado y gritos aterradores que repite por todo el camino “¿Dónde están mis hijos?”

Hay varias versiones, una dice que era una mujer normal y corriente que vivía sola con sus tres hijos, porque su marido la abandono. Y un día volvió a casa. Ella y su marido se pelearon y ella se dio un golpe en la cabeza que la dejo inconsciente, cuando despertó no había nadie en casa, los buscó por todas partes y así durante días, semanas, meses y años, siempre se la veía correr, gritando, llamando a sus hijos. Al final murió de tristeza de no encontrar a sus hijos, y por eso dicen que aun esta vagando buscándolos.

Otras personas dicen que era una mujer bonita y soltera que se quedo embarazada pero abortó. Al poco tiempo ella empezó a escuchar el llanto de su hijo, y la volvió loca y empezó a vagar por las calles queriendo buscar paz pero nunca la encontró, por eso dicen que va vagando llorando y gritando por su hijo.

Otros dicen que ella mató a sus hijos por un desengaño amoroso y luego se arrepintió, por eso dicen que va vagando llorando y arrepintiéndose por lo que hizo.

La sucia:

Dicen que un joven de un pueblo de Santa Bárbara salió a visitar a una chica que le gustaba y se quedó hasta tarde. Cuando regresaba, pasó por un riachuelo y vio a una chica lavando ropa, como era de noche y estaba sola trato de seducirla sin que la chica le correspondiera y ignorándolo sin darle la cara.

Él trató de abusar de ella, sujetándola con fuerza y tratando de apartarle el pelo de la cara sin resultado alguno. La mujer se soltó de él y ella se puso a llorar, él se disculpó y le dijo que lo único que quería era un beso y la mujer asintió, se acerco y le empezó a apartar el pelo. De repente se escucho un grito muy fuerte y el hombre salió corriendo volviéndose loco al momento, y lo único que decía que había visto una mujer con cara de monstruo y con un aliento horrible.

Dicen que esta mujer se les aparece a los hombres mujeriegos en sitios solitarios. Dicen que se aparece en los ríos de El Salvador.

Es conocida como La sucia por su costumbre de aparecer lavando ropa sucia.

Lluvia de peces:

Dicen que es un fenómeno meteorológico extraordinario que sucede en la ciudad de Yoro, en la llanura llamada “El Pantano”. Consiste en una lluvia de peces que sucede anualmente entre mayo y julio, iniciado generalmente a las 4 o 5 de la tarde, con una nube negra seguida de fuertes descargas eléctricas, y al acabar la lluvia la gente encontraba cientos de peces esparcidos por el suelo aún vivos. La gente del pueblo los recogían y transportan a sus casas para comerlos.

Según los habitantes de Yoro, este fenómeno ocurre desde hace más de un siglo.

Varias teorías se han formulado, una de que es un milagro por el padre Manuel De Jesús Subirana, considerado por muchos un santo, al encontrar a mucha gente pobre y hambrienta rezó durante 3 días y 3 noches pidiendo un milagro para ayudar a los pobres que consiguieran alimentos. Otra teoría más acertada, atribuye a una tormenta marina procedente del Atlántico, por la constante dirección de donde la nube procede, por ir el chubasco  acompañado de frecuentes y formidables descargas eléctricas, y por caer en “El Pantano”, en donde hay minerales de hierro, hay quizá, un polo que atrae la tormenta.

Los silbidos:

Antes de llegar a la aldea Las Mesas, al cruzar el puente del río Neteapa hay una cuesta famosa  denominada La Cuesta de Neteapa.

En el pasado se produjeron algunos accidentes de coche cuando la carretera aun era de tierra. Antes de que se construyera la carretera los vecinos de Danlí viajaban, que les hacía perder 3 días al viajar con mulas y caballos. El último descanso lo hacían en el valle de El Zamorano; se viajaban en grupos para ayudarse mutuamente.

Cuando volvían a Danlí tomaban otro descanso en el río que en los años 20, era caudaloso; allí tomaban aprovechaban para refrescarse y para que bebieran los animales.

Era costumbre pasar temprano por Neteapa, ya que corría el rumor que de las seis de la tarde en adelante se oían voces y unas sombras  impedían el paso a los viajeros. La gente siempre muy supersticiosa y toma al pie de la letra todo lo que se refiere a hechos sobrenaturales.

Hay gente que ha intentado pasar más tarde y no a podido, decían que se veían formas muy tenebrosas y unos silbidos muy fuertes y los animales que les acompañaban se negaban a pasar y me ponían muy nerviosos.

La lechuza:
Decían que intentaba impedir que la madre le diera el pecho a los niños para que de esta manera murieran desnutridos. Las madres solían poner ajos para ahuyentarlas.
Decían que lo habían visto en Tegucigalpa y San Lorenzo.

Espiritos:

Se dice que por américa suelen ser más vistos por el echo de que hay tantas muerte sin motivo, sin resolver, por el tipo de vida y porque la gente es más abierta con estos temas, ya que bastante gente a tenido alguna experiencia con estos seres. 

Muchas personas dicen que si están aquí entre nosotros y los podemos ver es porque tienen algo sin resolver y se quedan vagando por aquí hasta que encuentran paz, otras personas dicen que están para protegerte y otras que no se les debe dar la espalda porque se te pueden meter dentro y dominarte.

También se dice que si ves pasar algo muy rápido y blanco es alguien cercano que se despide de ti.